La medida de MLB fue descrita a The Associated Press por una persona con conocimiento de los detalles y que habló bajo condición de anonimato debido a que no había autorización para difundir un anuncio.
El pasado sábado, los peloteros tacharon de inútil continuar la negociación con las Grandes Ligas e indicaron que los dueños deberían ordenar de forma unilateral que se inaugure la temporada pospuesta por el coronavirus, lo que podría desatar largos litigios y una nueva guerra laboral en el béisbol.
El paso dado por el sindicato el sábado por la noche podría derivar en una campaña de unos 50 juegos en vez de los 82 propuestos inicialmente por las mayores y los 162 de los que suele constar la temporada regular.
La Asociación de Jugadores de las Grandes Ligas podría responder interponiendo una queja que sería atendida por el juez de arbitraje Mark Irvings, bajo el argumento de que se adeuda una indemnización millonaria a los agremiados.
“Desafortunadamente, parece que un mayor diálogo con la liga sería fútil”, dijo Tony Clark, líder del sindicato, mediante un comunicado. “Es tiempo de volver al trabajo. Dígannos cuándo y dónde”, dijo Clark en ese momento.
El comisionado de Grandes Ligas Rob Manfred dijo durante el draft amateur de la semana pasada que la posibilidad de que hubiera una temporada era del “100%”.
“Puedo decirles sin temor a equivocarme que jugaremos béisbol de Grandes Ligas este año”, dijo durante la transmisión de ESPN.