"Ahora mismo el tiempo que tengo es ocupado. No descarto la idea de querer irme por ese lado, pero ahora mismo no está en mis planes", afirmó Ortiz a preguntas de Efe de si le interesaría tomar el puesto de piloto de los Medias Rojas, tras la salida del puertorriqueño Alex Cora.
"Sé que Boston encontrará a la persona indicada para suceder a Alex, porque trajo una química inmensa al equipo", reconoció Ortiz, uno de los bateadores designados más temidos en la historia del béisbol y que por ello ganó 8 veces el premio Edgar Martínez, concedido al mejor bateador designado de la Liga Americana.
Ortiz, retirado de las Grandes Ligas en 2016 tras jugar 14 temporadas con Boston y otras seis con los Mellizos de Minesota, explicó que el comprometerse para integrar al cuerpo técnico de algún equipo de béisbol "tiene una dedicación, al igual que cuando te preparas como jugador".
Ante la salida de Cora de los Medias Rojas, por estar involucrado en un lío por el robo de señales cuando fue entrenador de banca de los Astros de Houston en 2017, Ortiz propuso que la organización elija como mánager al expelotero dominicano Carlos Febles, actual miembro del equipo técnico de Boston.
"Soy fiel partícipe de ese clubhouse (camerino) mientras Alex estaba. Espero que eso se resuelva", dijo el también conocido como "Big Papi", de su excompañero de equipo con los Medias Rojas.
Ese resultado es a una investigación de las Grandes Ligas (MLB, en inglés) que encontró una confesión del lanzador Mike Fiers, exmiembro de los Astros de Houston en la campaña de 2017, según la cual el equipo puso cámaras de vídeo en los jardines del campo para espiar las señas del receptor al lanzador de los rivales.
Las señas eran comunicadas a los bateadores a través de golpes con los mismos bates a cestos de basura próximos.
Antes de ser el piloto de los Medias Rojas, Cora dirigía la banca de los Astros en la campaña de 2017 que terminó con el título de la Serie Mundial.
El 14 de enero los Medias Rojas anunciaron la salida de Cora, un día después de que el comisionado de MLB, Rob Manfred, lo vinculara en el escándalo de robo de señales.
El puertorriqueño y la novena de Boston coincidieron en que la desvinculación era lo mejor para las partes.
"Alex tiene un conocimiento brutal y es una persona que entiendo que tiene que mantenerse alrededor del béisbol por su análisis y por la forma en que él enseña a los jugadores en desarrollar su confianza", admitió Ortiz, retirado con 541 cuadrangulares.
Sobre su lanzamiento de honor en el partido entre Puerto Rico y República Dominicana, Ortiz recordó sus participaciones en Series del Caribe, que incluyeron dos campeonatos, en los años 1999 y 2003, ambos celebrados en San Juan.
En ambos torneos fue pieza clave ofensiva de dos coronas de campeonato para país.
En 1999, representando a los Tigres de Licey, fue líder de su tropa y del torneo con nueve carreras impulsadas.
En el 2003 fue más allá con las Águilas Cibaeñas.
Su bate ardió de tal manera que fue elegido "Jugador Más Valioso" de esa edición y miembro del equipo "Todo Estrellas".
Entre números ofensivos fue el campeón bate con .462 de promedio y líder en remolcadas con 11.
"Tenía mucha hambre de venir a Puerto Rico", agregó Ortiz, quien este miércoles fue reconocido por la Legislatura Municipal de San Juan como "Visitante Distinguido de San Juan, capital de Puerto Rico".