El puertorriqueño Díaz fue expulsado por el jefe de umpires, Vic Carapazza, tras una revisión de sus manos, gorra y guante al inicio de la parte baja del noveno inning en la eventual victoria de los Mets por 5-2. A pesar de defender su caso junto al manager venezolano Carlos Mendoza, Díaz no tuvo éxito y no lanzó un solo lanzamiento en el juego.
“Tan pronto como me vieron, intentaron expulsarme del juego”, manifestó Díaz. “Lo entendí. Ese es su trabajo. Eso es parte del juego”.
En su lugar, Drew Smith entró para lanzar en el noveno inning. Las expulsiones por sustancias pegajosas conllevan una suspensión automática de 10 juegos, que probablemente será impuesta por Major League Baseball esta semana. Díaz se convierte en el tercer lanzador de los Mets en ser expulsado por esa razón, siguiendo a Max Scherzer y Smith la temporada pasada.
“Definitivamente no era resina y sudor”, declaró Carapazza a un grupo de reporteros más tarde. “Hemos hecho mil revisiones de este tipo. Sé cómo se siente al tacto. Esta sustancia era bien pegajosa. …Sin duda era bien pegajosa. No me tomó mucho tiempo para tomar la decisión”.
La suspensión de Díaz pone de relieve el continuo esfuerzo de la MLB para hacer cumplir las reglas contra el uso de sustancias extrañas, asegurando la integridad del juego y el cumplimiento de las normativas establecidas.