Un grupo de investigadores aseguró que, hasta ahora, se han identificado y clasificado un total de 64.000 especies de árboles en todo el planeta, pero faltan más. La mayor diversidad de estos se encuentran en Sudamérica.
Los bosques proporcionan una gran cantidad de servicios ecosistémicos y sustentan la biodiversidad terrestre. Sin embargo, el número de especies arbóreas en todo el mundo no está claro debido a la desigual cobertura geográfica de las listas publicadas, así como a problemas financieros y taxonómicos. "Estimar el número de especies de árboles es fundamental para orientar, optimizar y priorizar los esfuerzos para preservar los bosques en todo el mundo", subrayó este estudio en el que participaron 150 científicos de todo el mundo
Un equipo internacional de investigadores ha recopilado una extensa base de datos mundial. Entre ellos, Sergio de Miguel, investigador del Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC) y profesor de la Universitat de Lleida (UdL), y Albert Morera, doctorando de la UdL. Esta operación cartográfica identificó aproximadamente 40 millones de árboles.
Según esta nueva investigación, efectuada a partir de una base de datos más completa y con un método estadístico más avanzado que los anteriores, el número total de especies rondaría las 73.300, es decir un 14% más. Mediante métodos estadísticos avanzados, que combinan la inteligencia artificial y el superordenador del Laboratorio de Computación Avanzada e Inteligencia Artificial de la Universidad de Purdue en Indiana (EE UU), los autores estimaron que existen 9.200 especies de árboles que están aún por descubrir.
En general, alrededor del 43% de todas estas especies no catalogadas, se encuentran en Sudamérica, seguida de Eurasia (22%), África (16%), América del Norte (15%) y Oceanía (11%). Al menos la mitad y quizá hasta dos tercios de todas las especies conocidas se encuentran en las selvas tropicales o subtropicales de los cinco continentes, estiman los investigadores. Muchas de las especies aún por identificar deberían encontrarse, por lo tanto, en estas regiones, donde se realizan menos estudios.
“Contar el número de especies arbóreas en todo el mundo es como un rompecabezas con piezas repartidas por todo el globo. Lo hemos resuelto en equipo, compartiendo cada una de nuestras piezas”, dice el profesor Jingjing Liang, coordinador de la Iniciativa Mundial de Biodiversidad Forestal (GFBI, por sus siglas en inglés) y coautor del artículo que publica la revista PNAS. El proyecto tuvo una duración de tres años.
Además, los científicos estiman que casi un tercio de las especies del mundo son raras y, por lo tanto, más vulnerables a la amenaza de extinción. Solo el 0,1% de las especies están presentes en los cinco continentes. América del Sur tiene la mayor proporción (49%) de especies endémicas, es decir, sólo presentes en este continente. Más concretamente, en los dos biomas compuestos por “pastizales, sabanas y matorrales” y “bosques tropicales y subtropicales” de la Amazonia y los Andes.
"Estos resultados resaltan la vulnerabilidad de la diversidad de especies de árboles en el mundo", escribieron los autores del estudio, en particular frente al "uso antropogénico de la tierra y el clima futuro". "Perder regiones de bosque con estas especies raras tendrá un impacto directo y potencialmente a largo plazo en la diversidad global de especies y su contribución a los servicios ecosistémicos", agregaron.
“Un amplio conocimiento de la riqueza y diversidad de los árboles es clave para preservar la estabilidad y funcionalidad de los ecosistemas”, explica Roberto Cazzolla Gatti, autor principal de este estudio y profesor del departamento de Ciencias Biológicas, Geológicas y Ambientales de la Universidad de Bolonia (Italia) “Hasta hoy, nuestros datos sobre amplias zonas del planeta eran muy limitados y se basaban en la observación sobre el terreno y en listas de especies que cubrían diferentes áreas. Estas limitaciones iban en detrimento de una perspectiva global de la cuestión”, continúa.
Los investigadores utilizaron desarrollos modernos de técnicas ideadas por primera vez por el matemático Alan Turing durante la Segunda Guerra Mundial para descifrar el código nazi, apuntó Reich.
“Este estudio representa un gran paso adelante en la ciencia y la investigación forestal al estimar la riqueza mundial de los árboles con un conjunto de datos más extensos, y métodos estadísticos más avanzados, que todos los intentos anteriores. Estimar el número de especies de árboles es esencial para informar, optimizar y priorizar los esfuerzos de conservación de los bosques en todo el mundo, y se lograrán estimaciones más precisas a medida que se vaya ampliando la muestra de especies, especialmente en aquellas zonas del planeta menos investigadas”, indica Sergio de Miguel.
En conjunto, los resultados sugieren que los esfuerzos de conservación deberían ser prioritarios en Sudamérica, además de en los bosques tropicales y subtropicales, que probablemente también albergan muchas especies raras aún no descubiertas, según los científicos.