La víctima no identificada estaba celebrando el cumpleaños de su hijo de 2 años y el fin de la cuarentena el sábado en el Parc Saint-Paul en Oise, a unos 80 kilómetros al norte de París, cuando fue arrojada de la montaña rusa llamada “Fórmula 1”.
Una testigo dijo que había estado esperando con sus hijos para subir a la atracción cuando escuchó gritos y vio el horrible incidente. “Ella pasó por encima de la barra [de seguridad] y su esposo intentó atraparla por el pie”, narró al periódico Courier Picard.
Los funcionarios del parque dijeron en un comunicado de prensa que una mujer murió en la escena el sábado después de caerse mientras el paseo estaba “en funcionamiento”. “El área del parque ha sido completamente cerrada para los visitantes”, agregó el comunicado.
Según los informes, fue la primera visita de la mujer al parque, y su madre y su hermana, además de su esposo y su hijo, estaban con ella.
La policía ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos y la causa del accidente. En ese parque de atracciones ya habían acontecido sucesos parecidos anteriormente, lo que ha obligado al director del mismo a indemnizar con grandes cantidades de dinero a las víctimas y a ser condenado a meses de prisión.