No obstante, hay personas que optan por peculiares estrategias para evitar pasar por el altar. Que se lo pregunten al protagonista de nuestra historia, un ciudadano chino corriente, identificado como Señor Chen, que ideó un robo para no tener que casarse con su prometida.
Según nos cuenta LAD Bible, el Señor Chen pensó que decepcionaría a su novia si ella se enteraba de que había sido arrestado por robo, así que, ni corto ni perezoso, entró en una academia de baile en Shanghai y hurtó un altavoz bluetooth.
El mismo día las autoridades ya le habían arrestado por el robo de este objeto, valorado en 260 euros. La policía, no obstante, no se esperaba la confesión del Señor Chen: "Mi novia quiere casarse conmigo, pero yo no quiero casarme con ella. Sabía que me atraparían, aunque no pensaba que fuera tan rápido".
Chen ha admitido la sustracción del altavoz, que fue robado deliberadamente porque sabía que no iba a costarle demasiado dinero al propietario. El desdichado ladrón permanece bajo custodia, aunque, al tratarse de un delito menor, no pasará demasiado tiempo en las dependencias policiales.
Lo que está por ver es si su novia le repudiará por este acto o simplemente porque no quiere casarse con ella. Sospechamos, sea por una razón o por otra, que el futuro de esta pareja no parece demasiado brillante.