El relato comineza en Hertfordshire, Inglaterra cuando David Stokes ganó 40.000 euros en un juego de lotería y sin decirle a su familia, uso toda la plata en prostitutas, autos y también, según relata la esposa Sally Stokes, había intentado comprar drogas. La relación con Sally fue muy abusiva a lo largo de su historia juntos, pero nunca se imaginó que terminaría con ella estrangulada y con los dos hijos de la pareja asesinados.
Los Stokes estaban casados desde el 2011 y tuvieron dos hijos: Adam, de once años y Matthew de cinco. El primero de noviembre de 2016, Sally Stokes vivió el episodio de violencia más grande de su vida con su marido David, quien había dejado su celular en la cocina y encontró evidencia de los arreglos del hombre con prostitutas, incluso en momentos en los que decía no tener dinero para los viajes escolares de sus hijos.
Al descubrir dicha información, Sally enfrentó al ganador de lotería y luego, salió de su casa para procesar la información. Cuando retronó alrededor de las 21 horas su esposo la estaba esperando con un plan macabro: la saludó y espero a que se de vuelta para luego pegarle en la cabeza e intentar sofocarla con una almohada. Mientras que esto sucedía, Sally llamaba a su hijo Adam, quien era el único capaz de ayudarla en esa situación pero lo que nunca se imaginó es que en realidad, David había asesinado a sus dos hijos.
Sally, sin obtener respuesta, logró soltarse pero cuando estaba por salir por la puerta trasera, David logró apuñalarla y la retuvo en la casa, diciéndole a los policías que se encontraban afuera que en realidad tenía un arma. Al poco tiempo, el hombre decidió apuñalar a su mujer y ella decidió irse de la casa pidiendo ayuda. Así, la trasladaron hasta un hospital donde luego se enteró que el ganador de la lotería había asesinado a sus dos hijos y luego, había tomado la decisión de suicidarse.