Según dijo el director comercial de la empresa, Daniel Greenberg, al diario New York Post, el agua proviene del río Jordán y fue bendecida por un verdadero sacerdote.
El diseñador afirmó que el propósito del modelo consiste en trolear las colaboraciones entre diferentes compañías, mostrando hasta qué absurdo puede llegar.
"Pensábamos en la colaboración entre Arizona Iced Tea y Adidas, que vendían zapatos que [promocionaban] una compañía de bebidas que vende té helado en bodegas", reveló Greenberg.
"Por eso quisimos hacer una declaración sobre cuán absurda se ha vuelto la cultura de colaboración. […] Nos preguntamos, ¿cómo sería una colaboración con Jesucristo? Como judío, lo único que sabía era que caminaba sobre el agua", agregó.
Aunque la primera serie de los Jesus shoes, que se vendían por 3.000 dólares, se agotó en pocas horas, MSCHF promete organizar la venta "a las 11:00 cada segundo y cuarto jueves de cada mes".