Aquí es donde nace el término “sapiosexual” que hace referencia a aquellas personas que sienten atracción sexual por la inteligencia de otros y no por su físico. Este tipo de personas tienden a buscar una estimulación intelectual y no física.
Algunas características que pueden presentar los sapiosexuales, según el Departamento de psiquiátrica de la Clínica Las Condes, en Lister Rosserl, son las siguientes:
-Se excitan ante estímulos novedosos y prestan poca atención a lo que les resulta repetitivo.
-La atracción entre personas se provoca como un vínculo mental.
-Pueden sentirse atraídos por conversaciones que les presenten temáticas diferentes a lo que están acostumbrados.
-La atracción surge de un encuentro con las ideas de las personas, y la seducción surge en términos de resultar un imán erótico, desde el entusiasmar con expresiones verbales y con mover en el fondo a la persona.
-Suelen sentirse atraídas por una sola persona.
Según los sexólogos, hay más mujeres que se podrían definir como sapiosexuales que hombres. Esto se debe a que los hombres y las mujeres tienen cerebros distintos y, mientras el sexo masculino se estimula más con la vista, el femenino necesita de otros estímulos.
Otro de los elementos que puede hacer que alguien se exalte más por un cerebro que por el físico, es el de la inteligencia erótica. Los expertos aseguran que “la inteligencia erótica para los sapiosexuales es el juego de dos mentes. La conversación se convierte en un juego sexual, les gusta la sorpresa o lo inesperado y dejan espacio entre ellos para que surja el deseo y se mantenga el misterio”.
Es un tipo de atracción sexual que siempre ha existido pero hoy en día ha sido resaltado, dejando a un lado la superficialidad y buscando nuevas experiencias que se salgan de lo rutinario.