El propio padre de la pequeña dejó a la niña en la calle con un cartel en el que ofrecía a la menor a cambio del pago del tratamiento de su hijo. Tras la polémica desatada ante estos hechos, el padre ha asegurado que hizo eso en un intento de llamar la atención e intentar recaudar más fondos, pero no con intención de vender realmente a su hija.
Según informa "La Vanguardia", las plataformas de crowdfunding que recogían fondos para el tratamiento del pequeño han congelado la recaudación de los padres ante las críticas de los donantes, por lo que ahora el pequeño no tiene más fondos disponibles para su tratamiento, unos 90.000 yuanes (11.400 euros aproximadamente).
El niño se encuentra actualmente ingresado en un hospital chino, cuyo tratamiento cuesta aproximadamente 600.000 yuanes. ""Realmente lamento haberlo hecho, pero nos estábamos quedando sin opciones en ese momento"", apuntó el padre de ambos niños.
Por otra parte, las donantes de la campaña de crowdfunding quieren que no se hagan a la familia, sino al hospital para que se garantice su tratamiento sin intermediarios, por lo que estos donativos podrían reanudarse.