4
¿Beberías una pócima que te hiciese vivir 300 años?
La obra de teatro de 1922 del autor checo Karel Capek explora las consecuencias de una vida extraordinariamente larga.
Ha visto imperios nacer, y caer. Ha visto a personajes que se creían inolvidables borrarse de la mente de todo el mundo, hasta que el único bastión que queda antes del olvido absoluto es su mente. También ha tenido amantes, a los que ha visto morir. Tras 342 años ha pasado por varios nombres: Ellian Macgregor, Eugenia Montez, siempre manteniendo las iniciales E. M. de su nombre original, Elina Makropulos, con el que la nombró su padre.
La mejor oferta 24h más: Suscríbete hoy a National Geographic por 0,75€ al mes. ¡-82% dto por Cyber Monday!
APROVECHA
Elina fue la hija del alquimista Hieronymus Makropulos de la corte de Rodolfo II del Sacro Imperio Romano Germánico. Este alquimista, tras varios intentos, logró crear una pócima que aseguraba ofrecer 300 años de vida a la persona que la bebiera. Rodolfo, incrédulo, le dijo que primero lo probase en su hija, Elina, que al primer trago cayó en un coma, por lo que Hieronymus fue sentenciado a prisión. Una semana después, Elina despertó y escapó con la fórmula, comenzando una vida itinerante.
Si bien la historia es ficticia, en la vida real, este el emperador Rodolfo II se obsesionó con la alquimia, la magia y las ciencias cuando estudió en Madrid bajo la tutela de su tío, Carlos II de España. Por su corte pasaron grandes personalidades, como el matemático Kepler, y mantenía correspondencia con los genios de la época, como el astrónomo Galileo. Su excéntrica personalidad también le llevó crear colecciones de piedras preciosas o monedas extrañas, así como otras moralmente cuestionables, como de cráneos o un ejército de personas con deformidades anatómicas.
¿La vida eterna?
Lo curioso tanto de la obra de teatro, como de la ópera homónima de 1926 es que, tras pasar los 300 años, Elina se descubre ante el resto de personajes y sale de escena, a lo que estos entablan una discusión acalorada acerca del inmenso poder que supone la inmortalidad.
Algunos insisten que prolongar la vida de los hombres buenos les permitirá hacer el bien más tiempo, otros que eso desestabilizaría la sociedad y que se tendrían que revisar contratos sociales, como el matrimonio. Posteriormente, el debate vira hacia qué personas deberían tener acceso a este poder, si la élite intelectual (sin contar a las mujeres) o si sólo los descendientes de Elina.
Finalmente, Elina ofrece el pergamino con la fórmula a todos los personajes, aunque ninguno la acepta. Cuando cae en manos de Kristina hija de uno de los personajes que discutían, esta acerca el pergamino a una llama y lo quema, con lo que Elina se ríe y declara «el fin de la inmortalidad».
Un debate de 1922 muy presente un siglo después
Con el conocimiento acerca de los pilares moleculares del envejecimiento que se han desarrollado en las últimas décadas, algunas voces del ámbito científico claman que estas podrían ser las últimas generaciones de personas que, irremediablemente, envejezcan. Y, por tanto, las cuestiones que plantea la obra de Capek deberían comenzar a debatirse desde el ámbito bioético, social y político.
Todavía no se puede poner una fecha exacta al fin del envejecimiento, ya que, como indicaba el Dr. Mehmood Khan en este artículo, hacerlo sería imprudente. Pero sí que se puede comparar su estudio con otras disciplinas, como la lucha contra el cáncer. Hace 40 años, ser diagnosticado con cáncer era un diagnóstico definitivo y no se podía hacer más que practicar cuidados paliativos, pero en la actualidad más del 50 % de los cánceres tienen cura. Por ello, gerontólogos actuales son muy optimistas en tanto en cuanto a las edades que podrían alcanzar las generaciones actuales.
El envejecimiento de la población, una causa global
Aunque la Organización Mundial de la Salud indica que el envejecimiento como tal no es una enfermedad, sí que habla de los síndromes geriátricos como aquellos asociados al envejecimiento. Estos síndromes cobran especial relevancia cuando se atiende a las cifras poblacionales. Se estima que, en 2030, una de cada seis personas en el mundo habrá vivido 60 años o más, alcanzando un total de 1400 millones. Además, para 2050, se espera que el número de personas de 80 años o más alcance los 426 millones.
Por ello, los avances en la ciencia del envejecimiento se están centrando en que las personas que lleguen a dicha edad lo hagan de la forma más saludable y manteniendo la mayor independencia posible. Para ello, los científicos estudian el papel de los genes, de la microbiota, de los hábitos de vida y de la contaminación, y diseñan estrategias que sean lo más protectoras posibles. Ahora bien, cuando se habla de alargar la vida, vale la pena pensar en sus consecuencias, ya que podrían ser inesperadas y puede que no en el buen sentido.
Los autores de ciencia ficción exploran, en ocasiones, distopías que tratan temas muy interesantes y que pueden convertirse en actualidad. Por ello, de cuando en cuando, vale la pena tomar uno de sus libros y disfrutarlos con una mirada crítica. Si alguno de los lectores le ha sonado una campana cuando sus ojos han pasado por el nombre del autor, quizá es porque a su hermano, Josef Capek se le atribuye haber acuñado el significado actual de la palabra “robot”.
Escrito Por
Redaccion
Monday, December 1, 2025